lunes, 16 de febrero de 2009

Entre las sombras


















Entre las sombras, oculta
En el jardín nocturno,
crece la flor escondida
Donde el sol no calienta la tierra,
ni la lluvia humedece
Donde nadie se asoma
Hace tiempo que pasó el dolor
El miedo se tornó miseria,
en ese lecho de muerte en vida
No llega hasta mí su perfume
No alcanzo a verla siquiera
Pero oigo su voz; es su testigo:
¡Sigo aquí, no me olvides!

1 comentario:

  1. La soledad que desprende este poema es fuerte. Una flor apagada en su tristeza es un crímen, un sinsentido. La salvación está siempre en los otros. Es mejor amar que ser amado. Un hombre solitario o es una bestia o es un dios...

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